Tutorial Rabbids

¡Y con septiembre volvemos al trabajo! Bueno, en realidad yo no he parado, pero me he dedicado a otros menesteres, jejeje (y las que sois madres y estudiáis y trabajáis además, seguro que me entendéis). Dentro de una semana es el cumpleaños de mi niño. El año pasado a estas alturas ya tenía cositas pensadas, modeladas, etc. Este año está siendo más complicado, así que he empezado hoy, pero, sinceramente, no tengo muchas esperanzas puestas en esta tarta. Ya veremos lo que sale...¡sorpresa!

Aunque no he terminado de modelar, estaba ansiosa por publicar algo del tema, así que hoy os dejo hasta donde he llegado (paso a paso, toooooda la tarde). Espero que os sea útil y os guste.

 Para hacer el rabbid he empezado por la cabeza. He hecho una especie de perita:

Luego le he marcado los ojos y la boca:

"Vaciamos" la boca:

Ahora parece más un muñeco de Tim Burton que otra cosa, jajaja, pero ya lo iremos arreglando, no os preocupéis. Seguidamente, le marcamos donde van a ir las orejas, para poder insertarlas después:

Luego hacemos una bola un poco más pequeña que la cabeza, que será el cuerpo y con una esteca le damos un corte para hacer las patitas:

Le vamos dando forma a la barriguita y al culete (le he preguntado a mi hijo y dice que no tienen cola, que se les ve el culete):

Y con un palillo le hacemos un agujerito donde irá la cabeza insertada después:

A continuación hacemos lo brazos. Les vamos dando forma y luego con un cortecito hacemos la separación de los dedos:

Hacemos unas muescas en el cuerpo (como a la altura de los hombros) con una esteca para encajar los brazos:

Ahora vamos con las orejas. Hacemos dos rollitos y tratamos de estrecharlos más en un extremo. Con la esteca marcamos el interior de las orejas para ponerle después más fondant de color carne:

Hacemos una bolita de fondant de color carne y la aplastamos. La pegamos en la barriga:

Para los ojos hacemos dos bolitas de color carne. Con la esteca las vamos dejando huecas, como dos pequeños cuencos. A continuación hacemos dos bolitas blancas y las metemos dentro:

Les pintamos iris, pupilas y les ponemos una pizquita muy, muy pequeñita de fondant para simular el brillo de los ojos:

Ahora vamos con la boca. Hacemos un rollito pequeño de color rojo oscuro (o negro, marrón...como queramos) y lo vamos adaptando al interior de la boca con ayuda de la esteca. Después hacemos los dientes, que son muy fáciles: son dos cuadraditos. Luego los labios: una tira fina de color carne que pegaremos alrededor de la boca. Para la lengua, hacemos un cilindro chiquitito de color rojo y lo aplastamos un pelín. Lo vamos pegando todo con pegamento comestible:

Le pegamos la cabeza al cuerpo y luego, los ojos en la cara...¡esto ya va pareciendo otra cosa!

Mañana le pegaré las orejas, que aún están muy blanditas y se doblan. Os prometo foto, jiji.

Ya es ese "mañana" del que os hablaba anoche, jeje. Así he puesto las orejas...
Primero le insertamos un alambre (de los que se usan para las flores de fondant) en la cabeza:

 Dejamos que sobresalga la mitad aproximadamente para poder insertar la oreja después (ah, se me olvidaba: ponedle un poco de pegamento comestible a la punta de la oreja o al hueco de la cabeza donde irá la oreja, porque aunque con el alambre se suele sujetar bastante bien, es mejor que quede lo más sujeta posible):

¡Y ya tenemos nuestro rabbid!

Espero que os haya gustado y os sea útil. ¡Hasta la próxima!