Después puse parte de la mezcla en un molde que tengo en forma de dinosaurios pequeñitos y lo metí al congelador. Cuando lo saqué del congelador...¡qué gran invento! Estaban muy buenos y mi peque se los comió casi de una sentada, jajaja.
Como aún me sobraba "masa", pensé en hacer una tartita rápida y utilizarla como base. Dicho y hecho, jeje. Encontré una receta de tarta de queso con limón muy facilita y rápida y me puse manos a la obra.
Ingredientes:
400 ml. de leche condensada
250 gr. de queso crema (1 tarrina)
El zumo de dos limones
Para la base creo que utilizaba galletas y mantequilla, pero yo usé la que tenía.
Primero se hace la base, "encajando" bien la masa para que quede bien apretada:
Después batimos muy bien todos los ingredientes y los volcamos sobre la base. Lo metemos al frigo durante varias horas (yo creo que lo dejé por la noche hasta el día siguiente).
Como véis es muy sencilla y a mí me gustó mucho el sabor. La base quedó ligeramente crujientita, aunque yo pensaba que al provenir de una masa tipo bizcocho en vez de galleta quedaría más blanda.
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